Boletin 2002

Documento Histórico de la Cofradía del Rosario de Jaén

La copia de un escrito fechado en 1868 en posesión de las RR.MM. Dominicas de Jaén, nos revela datos importantes sobre los orígenes y vicisitudes de la Cofradía del Rosario, que pese a sus numerosos cambios de sede y la sucesión de períodos de esplendor y languidecimiento, ha permanecido hasta nuestros días preservada por la Orden Dominica.

Se trata de una carta dirigida al Obispo de la Diócesis de Jaén, solicitando el traslado de la Stma. Virgen al Convento de Sta. Clara, exponiendo en su demanda  junto a los motivos de su petición y mediante una breve introducción, parte de la larga historia de nuestra Cofradía. De esta escueta anotación obtenemos información sobre su fundación en el Convento de Santa Catalina Virgen y Mártir por los PP. Dominicos, y tras su supresión, del traslado al de las monjas de la misma orden, de Ntra. Sra. de los Ángeles. Asimismo, es de gran interés la referencia a la fusión en una, de las dos comunidades existentes en nuestra ciudad, y el de su traslado a Sta. Clara tras la supresión de conventos durante la desamortización , motivo principal de la demanda del recurrente.

Esta carta se convierte en uno de los escasos testimonios de la perduración de la Cofradía del Rosario a lo largo de los siglos en nuestra Capital, información privilegiada de un tiempo que no abarca la memoria; motivo por el cual reproducimos íntegramente en este artículo.

«Ilmo. Sr. Obispo de esta Diócesis de Jaén.

D. Antonio Giménez Callejón, religioso exclaustrado Dominico y Capellán actual de la Cofradía del Santo Rosario, que en otro tiempo fue fundada en el convento de Sta. Catalina Virgen y Mártir de esta Capital, del que es hijo el recurrente, a V.E.Y. respetuosamente expone: Que hace muchos años que por haberse extinguido dicho Convento la mencionada Cofradía fue trasladada con la Imagen de Ntra. Sra. del Rosario al de Religiosas de la misma Orden Dominicana, llamado de Sta. María de los Ángeles, puesto que donde haya iglesias de la referida Orden, en ellas es donde corresponde fundarse, conservarse o trasladarse las prenarradas Cofradías del Rosario.

Más como a consecuencia de la última supresión de conventos tanto las Religiosas de los Ángeles como las de la Concepción también dominicas, han sido trasladadas formando entre ambas una sola Comunidad al Convento de Sta. Clara de la Orden de S. Francisco de esta Ciudad, parece muy lógico que la precitada Cofradía Del Santo Rosario sea también trasladada a dicho Convento de Sta. Clara, puesto que su Iglesia habrá de considerarse ya no sólo de la Orden de S. Francisco sino que también de la de Sto. Domingo, mediante a que unas y otras han de dar culto en ella a los Santos y Devociones de su Orden respectiva a fin de que no sean perdidas las innumerables gracias con que cada una de ellas se encuentran enriquecidas por la liberalidad de la Santa Sede.

En su consecuencia, y contando el recurrente con el beneplácito de las R. Abadesa y Priora de estas comunidades, como también con el de los individuos que hoy componen la citada Cofradía:

“A V.E.Y. Suplica se digne a decretar que ésta con la Imagen de Ntra. Sra. del Rosario sea trasladada al antedicho Convento de Sta. Clara, considerándose su Iglesia como canónica, instituida a perdurantibus circunstantiis para ejercerse en ella todos los actos propios de la Hermandad, y poderse lucrar por sus individuos y demás fieles, las indulgencias y demás gracias concedidas por los Sumos Pontífices a los cofrades del Rosario y a las Iglesias y Capillas en que estas estén también debidamente instaladas. Es gracia por la cual queda el suplicante rogando a Dios que la vida del V.E.Y. m. a. Jaén 4 de diciembre de 1.868.”